En segunda vuelta, los senadores sancionaron, con texto de la Cámara de Diputados, el proyecto de ley ‘‘De garantías para las inversiones y fomento a la generación de empleo y el desarrollo económico y social’’.
El documento busca la captación de inversiones de capital nacional y extranjero para su aplicación en proyectos productivos en nuestro país, con el objeto de dinamizar la economía y contribuir con el desarrollo sostenible mediante la generación de nuevas fuentes de trabajo, el crecimiento de la industria y la incorporación de tecnología.
Entre otros, del Impuesto a la Renta, según el tipo de inversión y el monto invertido, el cual podrá ser ampliado hasta 20 años, según el rubro seleccionado y el monto de la inversión.
En primera vuelta los senadores rechazaron el proyecto, se necesitaban 30 votos para la ratificación del texto del Senado, lo cual no se alcanzó quedando sancionada la versión de Diputados, cuyo documento pasa al Poder Ejecutivo.
Al respecto de lo ocurrido, la senadora Esperanza Martínez señaló que es una pena que haya resultado así la aprobación de este proyecto porque consideran junto con los representantes del Frente Guasu.
“A través de esto lo que se hace es rifar el país a un capital extranjero que no va a venir solamente porque reduzcamos y hagamos desaparecer los impuestos. Van a venir si tienen las condiciones de ser un país serio que garantice que su inversión va a estar protegida por las leyes, por el cumplimiento de ellas y van a tener los beneficios de un país organizado que le presta aquellos servicios básicos que precisa para funcionar, como en el área de telecomunicaciones, internet, carretera, manos de obra calificada”, mencionó la parlamentaria.
Continuó diciendo: “Este es el caballito de batalla del presidente Cartes, su carta de presentación, que todas estas leyes sumamente protectoras de la inversión generarían una avalancha de inversiones que hasta ahora no hemos visto, lo que necesitamos son políticas serias y claras de inversión y no abrir las puertas a industrias basura con leyes como ésta que entregan la soberanía de nuestro país y de nuestra autoridad como Estado rector que regula las inversiones”.
La senadora agregó que el Senado se opuso desde un inicio, ya que existen leyes que de por sí ya son protectores como la Ley 60/90. “Lo que necesitamos es que haya una contribución de las empresas que se instalan en el país y no que vengan para llevarse todas las riquezas fuera del Paraguay”, finalizó.